El abogado Marco Sánchez Ponte acudió ayer a la gobernación de Chimbote para pedir garantías por su vida. Dijo que teme correr la misma suerte del ex consejero regional Ezequiel Nolasco Campos.
“He pedido garantías porque temo me pase algo malo, he presentado mi denuncia en la gobernación con hechos concretos y señalando nombres, pero por ahora me reservo decir quiénes son”, mencionó.
¿Acaso son los investigados por el atentado del 2010 contra Nolasco y por el asesinato de hijo político?, preguntó la prensa.
“Podrían ser ellos, pero mi abogado tiene la denuncia y repito si hay nombres”, señaló a su salida de la gobernación.
También dijo que a Nolasco Campos lo mataron sus enemigos por dos razones poderosas: Primero porque acababa de ser elegido candidato a la presidencia de Ancash por UPP y segundo porque tenía nuevas pruebas para demostrar en la Corte Suprema que los delincuentes que absolvieron los jueces de Chimbote fueron los que mataron a su hijo.
“En mayo se verá en la Sala Permanente de la Corte Suprema de Lima la apelación al fallo que puso en libertad a los asesinos del hijo de Nolasco, había nuevas pruebas que íbamos a presentar porque el ex consejero regional sabía que los jueces en Chimbote no iban a hacer justicia porque todo el proceso judicial fue comprado”, señaló.
El ex decano del Colegio de Abogados del Santa denunció además que su patrocinado era reglado, víctima de “chuponeo” y que a él lo ubicaron en Huacho a través de la interceptación telefónica.
“Lo único que pido es que no desvíen las investigaciones de los verdaderos asesinos, Nolasco fue mi amigo y quienes lo mataron podrían ser los mismos que atentaron contra su vida el 2010 porque los proyectiles utilizado la noche del 20 de julio fueron nueve milímetros como los usados el 14 de marzo”, agregó
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