martes, 21 de febrero de 2017

 Lorenzo Machaca Esquía el policía con vocación



La historia
El Viernes 17 de febrero cuando, aproximadamente a las  22:40 horas, Lorenzo Machaca Esquía (29), decidió arriesgar su vida y enfrentarse al atacante, hasta ese momento desconocido.
El suboficial, quien estaba de civil pues era su día de franco y se encontraba en el lugar en compañía de una amiga luego de salir de una universidad local donde cursa el IX ciclo de Derecho, se topó de pronto con este suceso.
“Todos salían despavoridos en diferentes direcciones gritando que un ´desadaptado´ está matando a la gente. escuchó los gritos de la gente que huía buscando dónde esconderse y disparos en ese instante supe que debía actuar, pues como policía uno siempre está de servicio”, contó el agente

No lo pensó dos veces y se dispuso a actuar frente a una situación que aún desconocía. Su espíritu policial no lo abandonó ni un solo instante y, tras dar cuenta de la emergencia a su comando, tomó su arma, ubicó al agresor y disparó tres veces contra el atacante, quien falleció en el lugar.
“Mi obligación en ese instante era anular toda amenaza que significase un mayor costo social que ya era bastante grande, pues había escuchado que había matado a varias personas y habían muchos heridos”, explicó el suboficial.
 “Tras llamar a la Central 105 para comunicar el hecho, decidí neutralizarlo para impedir que siga matando a más personas”, agregó.
 “Rastrillé mi arma y disparé cuatro veces contra él. Directamente al pecho y a la cabeza. Cayó al suelo aún con vida y de inmediato me acerqué para desarmarlo, pues aún resultaba una amenaza”, refirió.

Dijo que al notar sus signos vitales llamó al auxilio médico para que sea trasladado a un centro hospitalario y  salvar su vida.  “Era una persona desequilibrada, pero mi deber era prestarle auxilio sin considerar los hechos. No podía dejarlo morir”, explicó.
  Indicó que como estaba de civil tuvo que identificarse como policía frente a las personas que estaban alrededor y vieron que había disparado. “Mostré mi placa para que sepan que quien había actuado era un policía y que se alejaran del lugar para seguir el procedimiento policial”, puntualizó.
 El deber primero
Pese a que sabe que puso en peligro su vida, el suboficial  Machaca Esquía confesó que  lo volvería a  hacer sin pensarlos dos veces.

“La vocación y preparación policial crece en los momentos más críticos no importa que estemos de civil,  vacaciones o de franco. Nosotros siempre estamos de servicio y la población debería sentirse segura en la calle, si hay un policía cerca, uniformado o no, siempre vamos a estar a su servicio”, manifestó convencido de su vocación que, asegura, nunca lo abandonará.

Lorenzo Machaca tiene nueve años de servicio en su institución. Hace un año trabajó en la comisaría de la Ensenada en Puente Piedra y  el día del ataque recién se había incorporado a la Sección de Operaciones Especiales (SOES) de la División Territorial Norte 1 y piensa ser policía siempre y “hasta que la vida me lo permita”.
 fuente Andina.
Señaló que estudia Derecho para poder apoyar a su institución desde alguna oficina de asesoría jurídica pero “si el comando me designa a una dependencia policial, lo haría gustoso”, pues por encima de todo está su vocación policial.


Machaca Esquía agradeció las muestras de reconocimiento pero sostuvo que actuó en cumplimiento de su deber. Dijo no estar arrepentido de haber actuado como lo hizo y que lo volvería hacer sin dudarlo. “Mi objetivo era salvar a gente inocente”, concluyó.