Tenga cuidado al comprar con tarjetas de crédito oh.

Una indignada ciudadana denuncio a los funcionarios de Financiera A-1, quienes manejan la famosa tarjeta Oh, con la cual se puede hacer compras a crédito en diversos centros comerciales como Plaza vea, Oeschle, entre otras tiendas famosas de nuestro país. El drama de Ethel Bazal Mayo por el cobro de lo que nunca compro con su tarjeta Oh, se convierte en una pesadilla en esta Navidad, por error cometido por los funcionarios que manejan estas tarjetas, los hechos sucedieron cuando la denunciante estando de paseo por la ciudad de Barranca compro productos en la tienda Oeschle, al momento de acercarse a la caja a pagar con la tarjeta le estaban cobrando 600 soles, monto que no era el justo de acuerdo a la compra.

De inmediato la cliente hizo el reclamo correspondiente y el vaucher fue corregido, aparentemente el problema no pasaría de un simple error de cajeros, pero lo peor vendría un mes después, cuando Ethel se acercó a pagar en Huacho su deuda y se llevó tremenda sorpresa pues esta ascendía a más de 1,100 soles. Consternada fue a reclamar, pero desconociendo sus propios vaucher los empleados de tarjetas Oh, la enviaron a Barranca para solucionar este problema siendo cliente de Huacho..

En la actualidad la denunciante Ethel Bazalar , ha viajado 4 veces de Huacho a Barranca, consiguiendo solo malos tratos, de parte de los funcionarios de Financiera A-1 quienes son los que administran las tarjetas Oh, solo la han “paseado” olímpicamente, inclusive la conminan a pagar primero y reclamar después, obligándola a dejar constancia en el libro de reclamaciones de esta entidad financiera.

Sintiéndose totalmente robada la empresa y tarjetas Oh, la afectada ha denunciado este abuso por cobro doble y fraudulento a Indecopi, esperando obtener justicia a este descarado robo por parte de Financiera A-1 y tarjetas Oh, de la que es víctima, a casi dos meses del problema donde la han tratado muy mal y encima le cobran insistentemente vía telefónica y con mensajes a sus celular, una deuda inflada de manera negligente pretendiendo que pague por algo que nunca consumió.