La historia ha captado mucho la atención, al conocerse que el pequeño Willie Myrick, quien es parte de una iglesia evangélica, consiguiera que su captor cambiara de opinión gracias a que entonó durante tres horas el tema religioso “Every Praise” para implorar a Dios por su vida.
Según el medio USA Today, el menor relató que mientras él cantaba, el sujeto maldecía y le decía que se callara, hasta que no soportó más. “Abrió la puerta y me echó”, contó Willie. “Él me dijo que no se lo dijera a nadie”, añadió.
La Carmel Baptist Church, capilla a la que asiste regularmente el niño y su familia, le organizó una celebración en su honor gracias a que regresó con sus padres sano y salvo.
Al enterarse de la noticia, Hezekiah Walker, cantante de gospel ganador de un Grammy y autor de la canción que entonó Willie, se emocionó tanto que decidió viajar desde Nueva York hasta Atlanta solo para conocer al niño.
“Realmente creo que Dios habló por medio de mi para salvar la vida de este joven”, dijo Walker quien lloró conmovido al estrechar entre sus brazos al pequeño.
El secuestrador aún no ha sido capturado, por lo que la policía estadounidense difundió un retrato hablado para dar con su paradero.
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